excelente elección para explorar cárdenas y sus alrededores

tuvimos una estancia muy agradable con un ambiente limpio y un desayuno típico delicioso que nos ayudó a empezar bien el día, además, la ubicación central del hotel nos permitió visitar fácilmente el parque central y otros lugares emblemáticos en menos de 10 minutos a pie.

Las instalaciones son impecables, y el restaurante tiene una variedad de platillos típicos que disfruté mucho, especialmente el consomé de pollo.

me sentí muy cómodo, no he tenido ningún inconveniente

delicioso, delicioso, delicioso

Chicos, el restaurante aquí es simplemente increíble! Disfruté de un consomé de pollo que me hizo sentir en casa. ¡mágico y lleno de sabor! Además, los chilaquiles del desayuno son para morirse, todo acompañado de un café que me despertó feliz. La habitación, limpia y cómoda, me brindó una gran experiencia para recargar energías entre cada deliciosa comida.

Lo recomiendo ❤️🥰

Las habitaciones estaban limpias y contaban con aire acondicionado. El restaurante servía un desayuno típico riquísimo, con opciones como chilaquiles. La atención del personal fue siempre amable y cercana.

Todo ha ido genial.

Fue una buena elección para una estancia concisa en Cárdenas con una buena relación calidad precio. El restaurante tenía un desayuno típico excelente, realmente lo disfruté. Recomiendo que busquen estacionamiento en la calle, es fácil encontrarlo.

El restaurante tiene platillos típicos muy sabrosos.

Mi experiencia en el hotel fue bastante decepcionante. La habitación que me tocó estaba al lado de la recepción, lo que resultó en un ruido constante de risas y conversaciones durante la noche. Además, el servicio del restaurante fue muy deficiente, ya que tuvimos que esperar mucho para que nos atendieran y luego para obtener nuestras bebidas, lo que arruinó un poco la experiencia al cenar.

El hotel tiene un restaurante buenísimo con un desayuno típico delicioso. Sin embargo, se escuchaba ruido de la recepción toda la noche.

La cena de consomé de pollo fue espectacular y los chilaquiles del desayuno llegaron cargados de sabor. todo eso me hizo volver a recargar energías. Además, el hotel cuenta con instalaciones limpias y cómodas que te hacen sentir a gusto. Solo desearía que el café se incluyera con el desayuno, pero eso no arruinó mi experiencia, ¡definitivamente vale la pena!

El hotel madan tiene un restaurante que sirve comida típica riquísima. La habitación king que ocupamos era cómoda y contaba con aire acondicionado, lo cual fue perfecto. Además, está cerca del parque central, lo que facilita conocer la zona. El fitness center también fue un buen añadido para mantenerse activo durante la estancia.

Lo recomendaría.

El restaurante ofrece platillos muy sabrosos y el servicio de limpieza es efectivo. Además, el personal es muy amable y atento a las necesidades de los huéspedes.

Aunque las habitaciones son agradables, el ruido en la recepción puede ser molesto durante la noche.

La habitación estaba limpia y cómoda, ideal para descansar. Tenía aire acondicionado y TV por cable. La única queja sería que estaba un poco ruidosa, ya que se escuchaba lo de la recepción durante la noche. Pero por lo demás, todo bien.

El hotel tiene un restaurante buenísimo. Cené consomé de pollo que estaba delicioso y un sándwich de atún con papas que también fue muy bueno. Los chilaquiles en el desayuno fueron memorables. Sin embargo, mi habitación estaba al lado de la recepción y el ruido fue un problema, ya que se escuchaban risas y pláticas durante la noche. noté que en la habitación se desperdiciaba mucha agua antes de que saliera caliente. Aunque había gran cantidad de policías federales hospedados, lo que me hizo sentir un poco incómodo por el posible peligro. La tarifa de la habitación era un poco alta para lo que ofrecía. En resumen, hay detalles gastronómicos excelentes, pero el ruido y la incomodidad podrían mejorarse.

Instalaciones limpias y cómodas. El restaurante tiene platillos típicos buenísimos, como el consomé de pollo y sándwiches deliciosos.

El café no venía incluido con los chilaquiles, ¡como si mi necesidad de café fuera un lujo!